NOS SERENAMOS

Siéntate en una postura cómoda.

Relájate. Cierra los ojitos si te apetece.

Pon la manita en el corazón.

Haz tres respiraciones profundas.

Ya puedes abrir despacito los ojos.....

Dios te escucha.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. AMÉN.

ESCUCHAMOS

A veces somos como el hijo Pródigo, no hacemos caso de nuestros padres....¿VERDAD?

Pero todos sabemos que ellos quieren lo mejor para nosotros y nos quieren tanto que siempre nos perdonan.

Jesús, sé que a veces he actuado mal,

sé que no he hecho lo que tú nos has enseñado, lo que tú esperas de mí.

Pero sé también que tú me amas, y por eso me sabe mal haber actuado así

y te pido perdón y te pido también que me ayudes a no volver a actuar así y a ser siempre como tú.

AMÉN.