NOS SERENAMOS
Siéntate en una postura cómoda.
Relájate. Cierra los ojitos si te apetece.
Pon la manita en el corazón.
Haz tres respiraciones profundas.
Ya puedes abrir despacito los ojos.....
Dios te escucha.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. AMÉN.
ESCUCHAMOS
Vamos a conocer otra de las historias de la vida de Jesús, la de hoy es muy especial. Jesús se está despidiendo de sus discípulos pues sabe que va a morir. Los ve tristes y con miedo. Todos saben que están viviendo las últimas horas con su Maestro. ¿Qué sucederá cuando Jesús ya no esté con ellos? ¿A quién acudirán? ¿Quién los defenderá? Jesús quiere darles fuerza contándoles sus últimos deseos.
Lectura del Evangelio según San Juan 14, 23-29
Jesús le contestó:
El que me ama de verdad se mantendrá fiel a mi mensaje; mi Padre lo amará, y mi Padre y yo vendremos a Él y haremos en Él nuestra morada. Por el contrario, el que no me ama no se mantiene fiel a mi mensaje. Y este mensaje que os transmito no es mío; es del Padre que me envió. Os he dicho todo esto durante el tiempo de mi permanencia entre vosotros. Pero el Abogado, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, hará que recordéis cuanto Yo os he enseñado y os lo explicará todo.
Os dejo la paz, mi paz os doy. Una paz que no es la que el mundo da. No viváis angustiados ni tengáis miedo. Ya habéis oído lo que os he dicho: “Me voy, pero volveré a estar con vosotros”. Si de verdad me amáis, debéis alegraros de que vaya al Padre, porque el Padre es mayor que yo. Os lo he dicho ahora, por adelantado, para que, cuando suceda, no dudéis en creer.
Palabra de Dios
Amor y paz
esto, tan sencillo, es lo que nos pide JESÚS.
¿Se os ocurre cómo conseguirlo? ...
Comentarios
Publicar un comentario