NOS SERENAMOS
En un momento de silencio, respira tranquilamente y olvídate de todo lo demás. Hazte consciente de tus propios sonidos. Eres tú. Es ahora… Dios está aquí. Salúdalo.
¡Buenos días a todos! Otro día más, nos ponemos en presencia de nuestro amigo Jesús, le damos los buenos días y las gracias por poder estar aquí todos juntos compartiendo este momento.
Ahora es momento de relajarnos, de respirar profundamente y de abrir nuestro corazón a lo que hoy nos vamos a escuchar.
Hacemos tres respiraciones profundas....
DIOS ESTÁ CON NOSOTROS.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo...
ESCUCHAMOS
Hoy rezamos con el Evangelio del Domingo. Veamos este video.
Imagina a un agricultor sembrando semillas en la tierra. No hace nada más y, sin embargo, las semillas germinan y crecen por sí solas. Primero sale un tallo pequeño, luego las hojas y, finalmente, la planta da frutos.
Jesús usó la historia de una semilla de mostaza. Es la semilla más pequeña que existe, pero cuando crece se convierte en una planta grande que da cobijo a los pájaros.
Jesús nos enseña que el Reino de Dios es como estas semillas. Comienza pequeño, pero con el tiempo crece y se vuelve fuerte.
COMPROMISO: Durante el día de hoy estaremos atentos a todo lo que Dios nos pide: un buen gesto de un compañero, una sonrisa, jugar con el que está solito....
REZAMOS JUNTOS
Imagina a un agricultor sembrando semillas en la tierra. No hace nada más y, sin embargo, las semillas germinan y crecen por sí solas. Primero sale un tallo pequeño, luego las hojas y, finalmente, la planta da frutos.
Jesús usó la historia de una semilla de mostaza. Es la semilla más pequeña que existe, pero cuando crece se convierte en una planta grande que da cobijo a los pájaros.
Jesús nos enseña que el Reino de Dios es como estas semillas. Comienza pequeño, pero con el tiempo crece y se vuelve fuerte.
COMPROMISO: Durante el día de hoy estaremos atentos a todo lo que Dios nos pide: un buen gesto de un compañero, una sonrisa, jugar con el que está solito....
REZAMOS JUNTOS
Aquí estoy Padre Dios(las manos con el dedo índice hacia abajo, señalando el suelo)dispuesto a abrir mis manos,
(las manos abiertas con palmas hacia arriba)para parecerme a Jesús y al Padre Faustino(manos entrecruzadas en el corazón y movimiento de latido)
para levantarlas con alegría(cara sonriente y brazos extendidos hacia arriba)para amar de corazón( un abrazo)para ayudar y dar la mano a todos.(ofrecerle la mano al otro)Bendice mis manos, Padre Dios.
Aquí estoy Padre Dios
para levantarlas con alegría
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