MIÉRCOLES: VIRGENCITA MARÍA

 NOS SERENAMOS

Vamos a imitar el nacimiento de una flor. De rodillas y con los ojos cerrados, escondemos la cabeza bajo nuestros brazos, como si fuéramos la semilla. Poco a poco empezamos a mover los brazos y los abrimos para recibir la luz del sol. Por último, nos levantamos y poco a poco abrimos los ojos.  

Hacemos tres respiraciones profundas. ¡Ya estamos preparados!

EN EL NOMBRE DEL PADRE, 
DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO. 
AMÉN

ESCUCHAMOS 

Virgen María… ¡Cuánto me cuesta perdonar a mis amigos/as que a veces me dicen cosas feas… o son egoístas conmigo! ¡Ayúdame a perdonar como tú lo hiciste cuando mataron a tu Hijo Jesús! 
Tú rezaste por toda la gente, también por los que te trataron mal. ¡Ayúdame a perdonar y a olvidar todo lo que me ha dado rabia de mis amigos/as!



REZAMOS JUNTOS




NOS DESPEDIMOS 

 


Madre Divina Pastora, ruega por nosotros. 

San José de Calasanz, san Faustino Míguez y beata Victoria Valverde, rogad por nosotros. 
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. 

Comentarios