NOS SALUDAMOS
¡MUY BUENOS DÍAS A TODOS!
¡Alegría que es de día!
NOS SERENAMOS
Siéntate en una postura cómoda.
Relájate. Cierra los ojitos si te apetece.
Pon la manita en el corazón.
Haz tres respiraciones profundas.
Ya puedes abrir despacito los ojos.....
Dios te escucha.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. AMÉN.
ESCUCHAMOS
María siempre creía y confiaba en Dios, sabía que Él la iba a acompañar en su camino, por muy difícil que fuera. Nunca la dejaría sola.
Ella es ejemplo de fuerza y esperanza, dos cosas que debemos tener nosotros para conseguir vencer a este virus. Ya queda poco para superarlo. Y gracias a vosotros, los niños y niñas que habéis demostrado durante todos estos años una gran fuerza. ¡SOIS LOS MEJORES!
REZAMOS JUNTOS
María, Madre nuestra, ayúdanos a ser personas de Esperanza.
NOS DESPEDIMOS
Madre Divina Pastora, ruega por nosotros.
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